¡A ensayar el mito de Pandora!

Personajes:

Presentador:

Epimeteo:

Pandora:

Mercurio:

La noche/ El amanecer y Voces dentro de la caja:

La muerte y El temor:

Enfermedad y Hambre:

La vejez:

Llanto:

Inquietud, ira y celos:

La desdicha:

Esperanza:

PRESENTADOR 
(Sale maquillado, con máscara, vestido brillante y en un tono de voz entonado y pausado).

Imaginaos una época, hace muchos, muchísimos años, cuando no existía en el mundo ni la desdicha, ni la enfermedad, ni el rencor. Una época en la que nadie se lastimaba nunca, ni envejecía demasiado. Y puesto que nadie envidiaba a su vecino, no había ni peleas ni guerras ni muertes. 

Una época en que reinaba la abundancia para todos y no existía la codicia. Los matrimonios no se peleaban nunca. Por este motivo, a Pandora y Epimeteo les gustaba bailar y cantar todo el día en una primavera que duraba todo el año.

Una persona poco amable hubiera dicho que Pandora era una mujer consentida, pero nadie era tan poco amable para decir semejante cosa.

Epimeteo gozaba llenándola de regalos. Cada día le llevaba un vestido nuevo, o unas sandalias, o joyas, o una estatua para el jardín. Y en esa búsqueda de objetos para Pandora, lo llevaban cada vez más lejos de su casa. 

EPIMETEO 

(le da un beso a Pandora y sale de escena)

-Pandora, mi luz. Ya salgo al trabajo. Prometo tráete un regalo esta tarde. 

PANDORA 

- OH, qué feliz soy, que feliz soy (canta una canción y baila acompañada de dos parejas más. Aquí el sol y la luna son personajes vivos y se mueven con la música, luego sale de escena)

EPIMETEO 

-(Entra en escena, como buscando algo) –mmmmm ¿Que le llevo a mi amada esposa hoy? ¿Que le puedo llevar?

MERCURIO 

(Entra imponente, es muy grande y poderoso, es un dios y trae algo muy pesado).

- Epimeteo, Epimeteo

EPIMETEO 

(Voltea asustado y se retira de Mercurio y baja la cabeza) a sus órdenes dios mercurio, en que te puedo servir

MERCURIO 

-Epimeteo, traigo un encargo del dios ZEUS nuestro supremo dios, para ti. Y como tú sabes, ningún mortal puede desobedecer al supremo dios.


Me pidió que te diera esta caja y que por nada del mundo la abras. Adentro de esta caja hay terribles cosas y si alguien la llega a abrir, la humanidad sufriría mucho.


Te ha escogido a ti, por tu prudencia y rectitud. No defraudes a Zeus o te arrepentirás (se esfuma)

PANDORA 

(Epimeteo llega a casa con la caja) – Qué es esto Epimeteo, ¿es un regalo para mí? (Le da una vuelta a la caja).


EPIMETEO 

No Pandora (con cariño pero con firmeza se lo dice)

Esta caja me ha sido confiada por el dios mercurio para que la tenga muy bien guardada. Y me advirtió que si alguna vez la abría iba a lamentarlo yo y también toda la humanidad. Y yo le prometí (se pone la mano en el pecho y muy solemne) que pasara lo que pasara jamás la abriría.


PANDORA 

- Déjame que mira dentro, solo un momento (suplica)

EPIMETEO 

- No Pandora, no nos pertenece, debemos respetar los deseos de Zeus y de Mercurio… Por favor, no la toques.

LA NOCHE/EL AMANECER 

Llega la noche, juegan, bailan, duermen. Pandora se levanta, despide a Epimeteo y queda sola.

PANDORA 

(Suena el tambor, como anunciando algo… Pandora da vueltas alrededor de la caja)

-Me pregunto ¿Qué habrá dentro? (sus dedos van y vienen sobre la caja)

-Creo que Epimeteo bromeaba acerca de lo que le dijo Mercurio. Al fin y al cabo es un regalo para mí. (Coqueta dice) además la promesa la hizo él y no yo. No va a pasar nada porque mire en su interior un momento (desata el nudo, se detiene, se aleja de la caja, vuelva, le da vueltas…) si rompo el sello, Epimeteo sabrá que he abierto la caja (duda, pero la abre un poco) sale un animalito.

PANDORA 

- Si parece un animalito, no puedo dejarlo encerrado dentro. 

VOCES DENTRO DE LA CAJA 

- Pandora, Pandora, por favor, déjanos salir.

PANDORA 

- Pero no debo, no debo, mi esposo dijo…


VOCES 

- Y qué sabe Epimeteo. Por favor, déjanos salir, el mundo nos necesita, el mundo no está completo sin nosotros

PANDORA 

(Se asusta y trata de cerrar la caja) – No, no debo

LA MUERTE 

(Saliendo de la caja, da vueltas, baila, se ríe muy feo, toca gente y esta va cayendo al suelo)

EL TEMOR 

(Sale de la caja, pega un chillido y Pandora se tapa los ojos)

ENFERMEDAD 

- Vendrá la lepra, la tos, la gripa, el cáncer, el sida y todas las enfermedades. Yo soy la enfermedad (Pandora tose)

HAMBRE 

- Ya no habrá comida para todos, el mundo peleará por alimento. Y yo estaré en las caras de los niños, yo soy el hambre.

PANDORA 

(Está horrorizada y trata de cerrar la puerta de la caja)


LA VEJEZ 

(Sale y empuja a Pandora y la hace caer al suelo) 

-Estúpida, ya no puedes detenernos, somos las cosas perversas que tu mundo jamás ha conocido, constituimos un presente de los dioses que envidian vuestra felicidad. Yo soy la vejez. (Hecha escarcha blanca en la cabeza de Pandora y esta envejece)

PANDORA 

(Se mira en un espejo, se ve vieja y está encorvada) llorando dice –que he hecho, qué he hecho y llora. 

LLANTO 

(Suelta una carcajada) – así lloren, que de aquí en adelante, no habrá un solo día que el mundo no derrame lágrimas. (Se ríe llorando)

INQUIETUD, IRA Y CELOS 

-Bajemos que allá viene Epimeteo 

EPIMETEO 

- Malvada, eres desobediente y egoísta. Te dije que no debías abrir la caja. Por qué no haces lo que te mandan.

PANDORA 

- Nunca me habías hablado así.

LA DESDICHA 

- Ves Pandora, por desobediente te acompañaré hasta tus últimos días, que ya son pocos y acompañaré a toda la humanidad gracias a ti. Ese es tu regalo al mundo. Le has regalado todos los males al mundo. Yo soy la desdicha.
(Se escuchan llantos, peleas, gritos, tambores)

PANDORA 

(Llora desconsolada)

ESPERANZA 

- Pandora, Pandora, no me dejes aquí sola, el mundo me necesita, el mundo no está completo sin mí.

PANDORA 

- No volveréis a engañarme (se aleja de la caja).

ESPERANZA 

- Pero es que yo puedo ayudarte. Por favor, déjame salir

PANDORA 

- Ya que más horrible puede salir de ahí (abre la caja y ve al animalito) ¿qué clase de linda y perversa criatura eres tú?

ESPERANZA 

- Yo soy la esperanza. Vengo a hacerle frente a todos los males del mundo. El mundo tendrá una razón para seguir adelante, para que tengan ratos de felicidad. 

PANDORA 

(SE ACERCA A EPIMETEO) 

-¿Podrá el mundo perdonarme algún día?

EPIMETEO 

- Eso espero, Pandora, Eso espero.

FIN